Solulim participa en la XVIII edición de la Feria de la Industria Cárnica.

18 mayo, 2016
La empresa taranconera, especializada en limpieza de industrias alimentarias, acercará sus servicios a los profesionales del sector del 8 al 11 de junio en Guijuelo (Salamanca). Solulim Higiene Alimentaria, empresa especializada en la limpieza de industrias cárnicas, estará presente por primera vez del 8 al 11 de junio en la XVIII Feria de la Industria […]
La empresa taranconera, especializada en limpieza de industrias alimentarias, acercará sus servicios a los profesionales del sector del 8 al 11 de junio en Guijuelo (Salamanca).
Solulim Higiene Alimentaria, empresa especializada en la limpieza de industrias cárnicas, estará presente por primera vez del 8 al 11 de junio en la XVIII Feria de la Industria Cárnica de Guijuelo (Salamanca), considerado uno de los eventos más importantes del sector que se llevan a cabo en España.
Desde el recinto ferial del municipio, será una de las 90 empresas expositoras que acerque a los profesionales del sector, y demás visitantes, sus servicios. Solulim, con casi 200 empleados y en continuo proceso de expansión, ofrece un servicio integral de higiene adaptado a cada instalación a través de trabajadores expertos en la materia. Su director general, Javier López Cortés, afirma que “somos una organización viva que aportamos soluciones en la línea de ahorro de tiempos de limpieza, ahorro de agua y mejora en el secado de superficie”.
Solulim es una empresa cercana a sus clientes, centrada en aportar valor a través de las personas, con la capacidad de prestar servicio en todo el territorio nacional. Con oficina en Tarancón (Cuenca), actualmente opera en distintos puntos de Castilla-La Mancha, Comunidad de Madrid, Castilla y León y Comunidad Valenciana.
Todas las entidades expositoras en la Feria de Industrias Cárnicas (FIC) 2016, que hace dos años recibió alrededor de 14.000 visitas, están dedicadas al sector auxiliar de la industria cárnica, donde la limpieza y desinfección son clave en un mercado que obliga a las empresas alimentarias a ser cada vez más competitivas y flexibles en su producción, manteniendo la calidad y garantizando la seguridad de los productos.